Este
esquema es el resultado del Grupo 4 de la puesta en común de nuestro trabajo individual,
sobre el Manual 2, y las conclusiones que hemos extraído de este intercambio de
ideas.
Situación: Cenar en casa de unos amigos
Lugar: Casa particular.
Objetos: Casa, obsequio, sofá,
aperitivos, mesa, sillas, cena.
Participantes: Invitados, habitantes de la
casa, familiares.
Antes: Expectación por
visitar/recibir a unos amigos; invitados no conocen la casa; no todos los
participantes se conocen; habitantes de la casa han preparado aperitivo y cena;
compra de un obsequio por parte de los invitados; relación cordial.
Después: Invitados han visto la casa;
invitados y habitantes han cenado juntos; todos los participantes se conocen;
relación más cordial.
Secuencia de acciones:
Saludar, entrar en la casa, entregar obsequio, hacer presentaciones, tomar
aperitivo, visitar la casa, hacer cumplidos, cenar, charlar, despedirse
cordialmente.
En
un primer momento barajamos la posibilidad de plantear dos esquemas, uno desde
el punto de vista de los anfitriones y otro de los invitados, pero finalmente
llegamos a la conclusión de que no era necesario, puesto unos y otros comparten
un mismo esquema mental, en esta situación. No se produce ninguna ruptura ni
malentendido que pueda llevarnos a separar los esquemas de unos y otros, de ahí
que hayamos concluido que comparten el mismo esquema social. Cuestiones como la
posible diferencia de horarios, el enseñar o no la casa a los invitados,
aspectos que estarían relacionados con esa diferenciación en función del origen
de los participantes, finalmente no han sido tenidas en cuenta.
Por
otra parte, también hemos debatido sobre la posibilidad de incluir la
invitación o emplazamiento a un nuevo encuentro que se realiza en la despedida
en la secuencia de acciones, aunque finalmente hemos decidido englobarlo en la
propia acción de despedirse cordialmente, al tratarse en sí de una cortesía.
Sin
embargo, a título personal me gustaría
añadir que el tema de los horarios me ha generando dudas a lo largo de toda la
actividad. Y es que en mi opinión en este punto sí que podrían diferir los
esquemas mentales de los participantes españoles y extranjeros. Si bien en
ambos esquemas mentales aparecerían los conceptos de cenar y de marcharse, es
la hora de hacerlo la que probablemente no concuerde. Pero, al mismo tiempo,
como ha señalado mi compañero de grupo Iván “no veo esquemas socialmente no
compartidos ya que la razón que da el extranjero es que “mañana madruga”. Es
decir que ofrece una explicación que no me permite inferir que “mañana
madrugue” debido a sus costumbres en tanto que extranjero”. Si nos fijamos con
atención en la secuencia, no hay nada que indique un malentendido o una ruptura
del esquema socialmente compartido. Es más, sabemos que se trata de una pareja
de española y otra extranjera sólo porque se indica en el enunciado.
Por otra parte, José ha señalado que deberíamos tener en cuenta los factores socioculturales. Se trata de una pareja relativamente joven y sin hijos, de clase media. Si hubieran tenido otras características el esquema socialmente compartido para esta situación habría sido diferente, empezando sin ir más lejos por la hora de la cena.
Hola, Nerea:
ResponderEliminarTus comentarios al texto de Escandell están muy bien; has destacado cosas que son importantes. En cuanto a lo que dices de los horarios y los esquemas mentales entre personas de distintos países, es verdad que, en la vida real, esa diferencia sería importante. Lo que pasa es que, en la situación que se daba como ejemplo del libro, esa cuestión se ha obviado por motivos didácticos.
Gracias por tu trabajo ¡y a seguir!
José